Carta de San Valentin

Quiero escribirte para que sepas lo mucho que te añoro y te aprecio,con esto también quiero demostrarte que nunca te olvidare porque en mi corazón ocupaste un lugar que nadie mas ocupara...


Sigo sentándome todas las mañanas en mi ventana para ver el amanecer y recordar cada día que pasa, qué fue lo que hicimos, qué errores cometimos, qué risas nos echamos, qué tristeza tuvimos,todo ello en el pasado; me siento para recordar como eras antes y lo poco que has cambiado, tú, que cogiste por costumbre cada día recogerme de mi casa y pasear por el solitario pero a la vez mágico mundo nuestro, que nadie mas puede comprender.

Cada día que pasamos juntos es único y especial, tanto como si es bueno o malo, lo aprovechamos al máximo ya que no sabemos si se volverá a repetir.

La primera vez que te vi pensé que tan solo eras uno mas, de aquellos que por muy guapos que son... de cariño, sensibilidad, amor, no encuentras nada. Al cabo del tiempo tu me transmitiste mas que eso, cada gesto que hacías era como una señal o motivo para acercarme a ti, era como si me echizases una y otra vez y el ciclo nunca acabase.

Tímida, te demostraba que te apreciaba, pero por miedo a que me rechazaras nunca te lo deje claro. Ahora odio todos esos días que pudimos pasar juntos y por nuestra timidez se quedaron en el olvido.

Recuerdo nuestro primer día en el que tu y yo expresamos nuestros sentimientos el uno al otro, yo tenia ganas de darme la vuelta y echar a correr, pero por otro lado no quería alejarme de tu lado, porque sin ti, las cosas no tendrían ya sentido, tú intentabas esconder tus ojos marrones en esa cara sonrosada que el sol te iluminaba, no tenias palabras para hablar, puesto que cuando lo intentabas, decías frases sin sentido, ahora expresas tus sentimientos y emociones como si fuésemos pareja desde que nacimos, no me escondes nada, yo a ti tampoco, confío en ti, y tu en mi, sabemos que no nos podemos enfadar, puesto que al instante nos perdonamos porque no podemos estar sin hablarnos.

Todos los días miro el amanecer porque tú me mostraste que en el puedes sacar la belleza del mundo en un día triste, me enseñaste como querías que te viese y no como te veía, me dijiste que siempre que estuviésemos lejos, si miraba el amanecer en él te vería reflejado, que vería todo aquello que añoro y seguiré queriendo.

Tenias razón... en todas aquellas cosas que me dijiste y yo te discutía, tenias razón en todo aquello que me enseñaste y que yo me negué a aprender, por eso aquí te pido perdón por todas esas contradicciones y quiero decirte que espero estar contigo siempre en cada minuto de nuestra vida, porque cada momento es especial y sin ti me sentiría invisible ya que el mundo no tendría sentido.

TE QUIERO y seguiré queriéndote ...